"Nada podemos esperar sino de nosotros mismos" | SURda |
|
25-08-2013 |
Rusia 1905, Uruguay 2013
Hacia 1904 se inician grandes huelgas. Bakú, ciudad a orillas del mar Caspio, es su centro, desde donde se extienden a todo el país. En 1905, un episodio desencadena la revolución. El líder obrero Gapón- a la vez, espía de la policía- organiza una gran manifestación pacífica delante del Palacio del Zar. Los bolcheviques, integrados a la manifestación, advierten el peligro represivo y proponen organizar la autodefensa armada de las masas. No son escuchados y las masas reclaman piedad y ayuda al “padrecito” Zar. La manifestación es cañoneada y mueren más de mil personas. La actitud bolchevique refuerza su influencia. En tales circunstancias, `murió fusilada la fe de los obreros en el Zar´.”
El episodio desencadena la Revolución Rusa de 1905. Y las revoluciones son fuentes inagotables de enseñanzas para los pueblos. Tengamos presente que “no hay acción revolucionaria sin teoría revolucionaria” (Lenin). Por de pronto, obsérvese las dos actitudes complementarias de los bolcheviques: la de integrarse a la manifestación y compartir la actividad equivocada de los obreros; y la advertencia del peligro represivo con una propuesta desestimada. La represión hará crecer su prestigio.
Salvando las distancias de escenarios muy diferentes, los trabajadores del Uruguay y el conjunto de clases y sectores populares, se encuentran próximos al grave peligro del retroceso del Frente Amplio como expresión de ese pueblo trabajador, con el retorno de un líder que desconoce los principios básicos de la izquierda, generador de propuestas que retrasan el desarrollo ideológico de gran parte del pueblo trabajador. Es que en el FA hay estilos, modos de obrar y pensar, que expresan enfoques de clases diferentes. El de los “empresarios” (denominación post-moderna de burguesía explotadora) o burgueses medios (y no tan medios) que han comenzado a reunirse en sus eventos calificados, preocupados por sus negocios, la mayor tasa de ganancia y el incremento de la explotación obrera, de una parte, muy bien representados por Vázquez y el equipo económico. Y el de los trabajadores y clases populares que discuten, resuelven y defienden sus intereses. Los trabajadores (y los jubilados o estudiantes, que en su mayoría han sido o serán trabajadores) deben saber que Trías, Sendic o Arismendi veían en esa burguesía media o “nacional” el límite del bloque popular, límite que definía quiénes eran de un bloque o del otro, precisamente por su conducta ante el imperialismo. En Uruguay del 2013, puede esperarse d e militantes no sectorizados y pequeños partidos del FA, las actitudes de aquellos bolcheviques: compartir el destino de los trabajadores y advertir del peligro en ciernes.
El Dr. Vázquez -que ha cortado el “cordón umbilical” con el Frente Amplio cuando fue electo Intendente de Montevideo y Presidente de la República, para hacer lo que quiso- con sus acólitos de centro y centro-derecha ha comenzado a imponer condiciones a la fuerza que lo puede ungir como candidato y que presenciaría después como gobiernan otros, la masonería católica, el Departamento de Estado y los organismos internacionales al servicio del gran capital. El Dr. Vázquez elegiría al vice-presidente, mantendría al equipo económico con el Ministro García, designaría Canciller a Astori, se acercaría a EE.UU., ingresaría a la Alianza del Pacífico, deterioraría con su sola presencia las relaciones con los vecinos (en especial con Argentina), se dispondría a que Uruguay asumiera el rol de Estado “disuasor” (al estilo de Israel) en la región. Lo pre-anuncia. Y no puede sorprender a nadie, aunque sepamos que desde ahora hilvanará algún discurso para la tribuna popular. El Dr. Vázquez, ha violado con reiteración el programa y valores mínimos de la izquierda. Ha usado el veto para oponerse a la ley de salud sexual y reproductiva. Ha desconocido resoluciones del FA a quien debiera representar. Ha embellecido al imperialismo norteamericano, poniendo en duda su existencia. Ha pedido ayuda de masón a masón a Bush contra el gobierno de Argentina. Ha pretendido con su “ nunca más ” dar por superadas las contradicciones del pasado dictatorial, cuando resta aún mucho por esclarecer de los crímenes de la dictadura. Su comportamiento indigna a los antiimperialistas y socialistas, que saben que lo principal no es “ganar” el gobierno como sea, sino saber hacia dónde vamos. Para esos fines cuenta con el aval del Frente Líber Seregni, del Partido Socialista, a años luz de la praxis de Trías, Gargano, Díaz o Chifflet. Y ha conseguido la complacencia del Presidente (al que destrató afirmando que decía “estúpideces”) y su cúpula cercana, que ya ha frenado atisbos de una política económica que haga frente al gran capital, que ha solicitado la calidad de observador en la Alianza del Pacífico, que organiza festividades y eventos con los representantes del gran capital y la Embajadora Reynoso, que agrede a los díscolos que cuestionan al “líder natural”. Obviamente, Vázquez cuenta con el apoyo de la masonería de derecha, del Opus Dei, del sionismo, del gobierno de Obama, a quien le viene como anillo al dedo un cómplice de “izquierda”, y que no se desvelará por el “giro a la izquierda” que en el discurso se verá obligado a hacer.
La indignación y la decepción arrastran a muchos frenteamplistas a abandonar la lucha política, a conformarse con no votar al FA para no votar a Vázquez, a mantener la conciencia tranquila de esquivar al encantador. Sin embargo, no alcanza. Es preciso algo más. ¿Qué es ése “algo más”?
Molestarse a concurrir a los Comités de Base desde el 25 de agosto a noviembre y conseguir un programa acorde a los principios fundacionales, adecuado para los tiempos de crisis del sistema, que no adopte las pautas del FMI y otros organismos crediticios, que radicalice la acción del FA y del gobierno futuro, con definiciones antiimperialistas y opuestas al gran capital. Y en paralelo, proponer y defender otras pre-candidaturas que supongan también un cambio generacional, una vinculación estrecha con los trabajadores, pequeños y medianos propietarios, sectores desposeídos y firmeza frente a los atropellos imperialistas que enfrenta el Mercosur y la región. Pre-candidatos o pre-candidatas que demuestren coraje para enfrentar a los poderes dominantes, capaces de recibir cada agravio como una condecoración.
Y por ende es preciso conformar un sub Frente Anti Imperialista de los opositores al sistema capitalista, de los que caminan al socialismo, de los que no están más dispuestos a los “ajustes” salariales y medidas semejantes para los “de abajo”, al tiempo que se favorece todo tipo de inversiones extranjeras.
Habrá que librar la batalla por los principios fundacionales del FA contra el FA de políticos y empresarios asimilados al sistema, de gobernantes aliados a Bush u Obama. Batalla hacia el Congreso de noviembre y las elecciones de junio, bien ligados con el movimiento obrero y popular, que entusiasme a unos y sirva para desenmascarar a quienes no enfrenten la desfiguración, convertidos en equilibristas calculadores. Y si a pesar de todo, el candidato fuera el Dr. Vázquez, es preciso disponerse a ser oposición frenteamplista a cualquier gobierno pro-capitalista y pro-imperialista, vazquista, rosado o de una entente entre ellos. A menos que el vazquismo decida con sus actos una dura campaña por el voto anulado.
“Historia del Partido Comunista (bolchevique) de la U.R.S.S.”
Copyright © 2007 SURda All rights reserved. webmaster@surda.se | |